BURSITIS

Tratamiento de la bursitis

Si busca tratamiento para la bursitis la fisioterapia le puede ayudar. La bursitis de cadera es una enfermedad dolorosa que afecta al 15% de las mujeres y al 8,5% de los hombres y tiende a desarrollarse más en personas de mediana edad y ancianos. La bursitis de cadera puede tener muchas causas, pero la más común es una actividad repetitiva, como caminar o correr sobre una superficie irregular, que crea fricción en la zona de la cadera.

La afección también puede estar causada por una marcha anormal, como la cojera, debido a una longitud desigual de la pierna, o por artritis en la espalda, la cadera, la rodilla u otras articulaciones de la pierna. También puede ocurrir sin ninguna causa específica.

La bursitis de hombro es una afección dolorosa que afecta a personas de todas las edades. La condición tiende a desarrollarse más en adultos de mediana edad y mayores, y en individuos que tienen debilidad muscular.

La bursitis de hombro puede tener muchas causas, pero la más común es una actividad repetitiva, como estirar la cabeza, lanzar o girar el brazo, que crea fricción en la zona superior del hombro. Los atletas a menudo desarrollan bursitis de hombro después de lanzar, lanzar o nadar repetidamente.

La afección puede producirse de forma gradual o repentina, o puede ser el resultado de una enfermedad autoinmune. También puede ocurrir sin ninguna causa específica.

La fisioterapia general puede ser un tratamiento muy eficaz para la bursitis de hombro para reducir el dolor, la hinchazón, la rigidez y la debilidad asociada en el hombro, el brazo, el cuello y la parte superior de la espalda.

Qué es la bursitis de hombro

La bursitis de hombro (también llamada bursitis subacromial) se produce cuando la bursa (una bolsa llena de líquido situada en el lateral del hombro) se daña, se irrita o se inflama, lo que provoca dolor.

Normalmente, la bursa actúa como un cojín para el tendón del manguito rotador del músculo supraespinoso que se encuentra debajo de la bursa, y evita que el tendón roce con el hueso acromion por encima de la bursa.

Ciertas posiciones, movimientos o procesos patológicos pueden causar fricción o tensión en la bursa, lo que lleva al desarrollo de la bursitis. Cuando la bursa se lesiona, el tendón no se desliza suavemente sobre ella y puede resultar doloroso.

Causas de la bursitis

La bursitis del hombro puede ser causada por

Movimientos repetitivos (alcanzar o levantar por encima de la cabeza, lanzar o girar el brazo)
Debilidad muscular o mala coordinación muscular
Postura incorrecta
Traumatismos directos (golpes o caídas sobre el lado del hombro)
Cirugía o sustitución del hombro
Depósitos de calcio en el hombro
Crecimiento excesivo o espolones óseos en el hueso acromion
Infección
Enfermedades autoinmunes, como la artritis reumatoide, la gota, la psoriasis o la enfermedad tiroidea
Contracturas musculares o tendones de la zona del hombro que rozan la bursa y causan irritación

Síntomas de bursitis

Con la bursitis del hombro, puede experimentar:

Dolor en la parte exterior o en la punta del hombro
Dolor al presionar con el dedo en la punta del hombro
Dolor al acostarse sobre el hombro afectado
Dolor que empeora al levantar el brazo hacia un lado
Dolor al girar el brazo
Dolor al empujar o tirar para abrir una puerta
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Diagnostico de bursitis

Si primero acude a su fisioterapeuta, éste realizará una evaluación exhaustiva que incluye la elaboración de su historial médico. El fisioterapeuta también le hará preguntas detalladas sobre su lesión, como por ejemplo

¿Cómo y cuándo notó el dolor?
¿Ha realizado alguna actividad repetitiva?
¿Ha recibido un golpe directo en el hombro o se ha caído sobre él?

También realizará pruebas especiales para ayudar a determinar la probabilidad de que tenga bursitis de hombro.

Presionará suavemente en la parte exterior del hombro para ver si es doloroso al tacto, y puede utilizar pruebas adicionales para determinar si otras partes de su hombro están lesionadas.

También observará su postura y cómo levanta el brazo para detectar otras afecciones más graves que puedan causar dolor en el hombro.

Tratamiento de fisioterapia para la bursitis

Reducir el dolor y la hinchazón.

Si las actividades repetitivas han causado la bursitis del hombro, su fisioterapeuta le ayudará a entender cómo evitar o modificar las actividades para permitir que comience la curación.

Su fisioterapeuta puede utilizar diferentes tipos de tratamientos y tecnologías para controlar y reducir el dolor y la hinchazón, incluyendo hielo, calor, ultrasonido, estimulación eléctrica, vendaje, ejercicios específicos y terapia manual, como el masaje especializado.

Mejorar el movimiento.

Se elegirán actividades y tratamientos específicos para ayudar a restablecer el movimiento normal del hombro y el brazo.

Estos pueden comenzar con movimientos "pasivos" que el fisioterapeuta realiza para que usted mueva suavemente la articulación del hombro, y progresar a ejercicios activos y estiramientos que usted mismo realiza.

Mejorar la flexibilidad.

Si algún músculo del hombro, del brazo, del pecho o del cuello está tenso, y empezará a ayudarle a estirarlo y a enseñarle cómo hacerlo.

Mejorar la postura.

Si se descubre que los problemas de postura están relacionados con su condición, trabajará con usted para ayudar a mejorar su postura para ayudar a aliviar su dolor, y prevenir futuras recurrencias.

Mejorar la fuerza.

La bursitis de hombro suele estar relacionada con músculos débiles, lesionados o descoordinados del hombro.

Ciertos ejercicios ayudarán a la curación en cada etapa de la recuperación;  elegirá y le enseñará los ejercicios correctos y el equipo que debe utilizar para restaurar constantemente su fuerza y agilidad.

Estos pueden incluir el uso de pesas en el manguito, bandas de estiramiento y equipos de levantamiento de pesas.

Mejorar la resistencia.

Recuperar su resistencia muscular en el hombro es importante después de una lesión. Su fisioterapeuta le enseñará ejercicios para mejorar su resistencia muscular, para que pueda volver a sus actividades normales.

Su fisioterapeuta le enseñará ejercicios de fortalecimiento y estiramiento para realizar en casa. Estos ejercicios serán específicos para sus necesidades; si los realiza según lo prescrito por su fisioterapeuta, podrá acelerar su recuperación.

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